El pasado mes de Diciembre recibí una
maravillosa invitación a una “twittrevista” para la hermosa página Felicescriando. Había olvidado, entre tantas cosas y tanto trabajo, compartirla por
esta vía.
No lo hago porque me guste presumir el ser
entrevistado, ni nada eso. Lo hago porque considero que lo que aquí se dice es
bastante importante, y porque me encantaría haber leído una entrevista de este
tipo cuando me estrené como papá (Vaya que la habría valorado), ya que mi nivel
de desinformación era extremo.
Acá se las dejo, espero la disfruten y le
saquen provecho:
1. Que es criar con Apego?
La Crianza con Apego, es aquella que tiene
como base y fundamento el amor, la contención, el respeto (bidireccional), la
comunicación y la confianza.
En este estilo de crianza se escucha al niño,
en vez de imponérsele. Se respetan sus opiniones y puntos de vista y se le
aprecia incondicionalmente.
No existe en este estilo de crianza el
chantaje, por lo que los premios y castigos están descartados.
El niño es tratado como un igual, que tiene
derechos y que merece respeto. No, como se acostumbra en la crianza
autoritaria, en la que se le impone un montón de deberes y jamás se habla de
sus derechos.
La comunicación en este estilo de crianza es
efectiva y bidireccional. Se escucha al niño y no se le imponen cosas porque
sí.
Se enseña con el ejemplo, y no con palabras
vacías. Y se resuelven los conflictos y diferencias desde el amor, el dialogo y
las demostraciones de afecto incondicional.
Uno de los lemas de este estilo de crianza es:
“Quiéreme cuando menos lo merezca, porque es cuando más lo necesito”.
2. ¿Por qué criar con apego?
El apego, el contacto, la contención y el amor
son requisitos indispensables para la sana autoestima, la confianza en sí mismo
y la construcción de unos cimientos en los que se afianzará la personalidad del
niño.
En los primeros 7 años de vida se establece
todo lo que va a ser la base estructural de la personalidad y del manejo de las
emociones en lo que será el resto de su vida. Por lo que es importante en este
período cultivar el respeto, la empatía, el amor sin condiciones y por supuesto
la confianza.
La forma en que se le habla y trata al niño en
sus primeros años de vida define y consolida la forma en que resolverá los
conflictos, abordará las situaciones difíciles y manejará su vida emocional. De
hecho, el tono de voz con que sus padres se dirijan a él en este período
definirá esa voz interna o voz de su conciencia que le acompañará en su vida
adulta. Por eso es tan común que la mayoría de nosotros (Quienes hemos sido
educados desde el autoritarismo) tenga una voz interna agresiva y autoritaria
que reprende y juzga constantemente, y pocas veces se dirige a nosotros con
amor y paciencia.
Los niños devuelven lo que reciben. Por eso,
deberíamos entender que si lo que les damos es amor, comprensión y respeto.
Pues eso mismo recibiremos a cambio.
No es de extrañar que la crianza autoritaria y
represiva termine siempre “pagando las facturas” cuando los niños alcanzan la
adolescencia. Pues es allí que estos, que ya han dejado de ser seres indefensos
y vulnerables, se hartan y comienzan a devolver todo lo que han recibido, como
por ejemplo la poca comunicación, el irrespeto y la intolerancia.
3. ¿Cuál es el papel del Papa en la crianza?
Papá tiene un rol de protector en los primeros años de vida. Debe sostener y
apoyar a Mamá, especialmente en los dos primeros años (El Puerperio), para que
esta pueda dedicarse y entregarse al bebé, que tanto lo necesita tanto física
como emocionalmente.
Mamá recibirá muchas veces una especie de
acción invasiva por parte del entorno, especialmente si decide dedicarse a la
lactancia exclusiva y a la crianza respetuosa. Vecinos, amigos, familiares,
desconocidos y hasta el mismo pediatra se colocan muchas veces en una posición
de juicio y ataque. Condenando y tratando se sabotear las acciones instintivas,
como por ejemplo la lactancia prolongada.
Es triste reconocerlo, pero muchos
especialistas, que deberían estar bien informados sobre los beneficios de la
lactancia y el contacto físico, parecen sumarse al ruido y la ignorancia del
entorno. Pasando por encima incluso de recomendaciones de la OMS y la Unicef
sobre los beneficios de la lactancia materna y del apego y el contacto para los
bebés.
Me gusta llamar a Papá el “Bastión emocional”.
Miremos el ejemplo de una fortaleza. La
fortaleza tiene un reducto fortificado que se proyecta al exterior de su cuerpo
principal generalmente en una de las esquinas de la misma. Se llama Bastión, y
es el punto fuerte de defensa contra el asalto de tropas enemigas o sea que es
por donde se reciben los ataques, pues en eso debe convertirse papá, en un
bastión emocional que protegerá a mamá y bebé de todos los ataques y
especialmente del “ruido” del entorno.
Los bastiones se crearon cuando las defensas
tradicionales ya no eran suficientemente fuertes para resistir cañonazos… ¿Y no
es precisamente a cañonazos de juicio a lo que se ven expuestos mamá y bebé en
este mundo moderno que condena y juzga cualquier cosa que nos reconecte con
nuestros instintos más básicos, catalogando lo instintivo de “involutivo” y
hasta de “bárbaro”?
Papá también deberá ayudar con los deberes del
hogar en el puerperio, ¿Y por qué no? Después también.
Atenderá y dedicará tiempo exclusivo al niño,
dando ratos de descanso a mamá. Esto último es importante para crear vínculo.
Algunos papás me han preguntado si deberían
dar biberón para crear vínculo. Yo les respondo que no. Lo mejor es que mamá de
lactancia exclusiva, y ustedes den tiempo exclusivo, jugando, abrazando,
cambiando pañales, dando una vuelta a la manzana juntos. No hay mejor manera
que esa de crear vínculo y fortalecer el apego.
4. ¿Cómo es un papa que cría con Apego?
Un hombre normal, que quizás disfrute del futbol,
del béisbol, de coleccionar cosas o de la buena música. Lo que nos diferencia
de un hombre que no cría con apego, es que vemos la crianza y educación de los
hijos como un asunto de pareja. No delegamos todo a mamá. Si trabajamos fuera
de casa, al llegar nos dedicamos a nuestros hijos. Jugamos con ellos, les
atendemos y les escuchamos con atención. También apoyamos a nuestra pareja y le
ayudamos con algunos deberes.
Por supuesto, somos mortales y humanos.
Tenemos derecho a tener malos días y malos ratos. Pero aprendemos a resolver
los conflictos de forma amorosa, a través del dialogo y la empatía. Pues
justamente esa es la forma en que queremos que nuestros hijos resuelvan los
asuntos en sus respectivas vidas.
Muchas veces los hombres, por vacíos
emocionales y carencias de nuestra infancia, caemos en una actitud infantil de
pretender más atención que la que mamá da al bebé. Nos sentimos en cierto modo
desplazados, y nos ponemos celosos de nuestra propia cría. Esto es natural y
normal. Los papás que criamos con apego y respeto también podemos pasar por
esta etapa, pero entendemos que nuestro bebé no tiene culpa de nuestras
carencias, entendemos que en este momento él necesita más que nosotros de la
presencia y el contacto de mamá, y entendemos que no solo lo necesita sino que
es vital para su supervivencia y para su estabilidad emocional. Así que dejamos
los celos a un lado y nos dedicamos a apoyar a la díada mamá-bebé, que nos
necesita como aliados y no como rivales.
5. ¿Que beneficios trae al hijo un papa que cría
con Apego?
Muchísimos. Para empezar, un papá que cría con
apego está muy lejos de ser una figura autoritaria, que dicta órdenes para que
se obedezcan sin cuestionarlas. Por lo que construye una sana autoestima en sus
hijos.
En mi trabajo como terapeuta y en mi propia
experiencia de vida, he comprendido la relevancia negativa que tiene en
nuestras vidas el haber crecido con papás impositivos, muchas veces hasta tiranos.
Muchas personas tardan muchísimo en sanar las heridas que les ha dejado ese
estilo de crianza represiva en la que muchas veces el maltrato era una
constante.
Las huellas que esto deja nos repercute e
influye a lo largo de nuestra vida en la forma como manejamos las situaciones
difíciles, en la forma en que tratamos a los demás, en la salud, en la
prosperidad y hasta en el tipo de pareja que buscamos. Conozco personalmente
casos de mujeres que han pasado años recibiendo maltrato de parte de su pareja,
que se dan cuenta que soportaban dicha situación porque en el fondo creían que
se lo merecían. Muchas veces este último mensaje era el que sus padres se
habían encargado de repetirles una y otra vez.
Como bien he dicho, una crianza respetuosa es
la base sobre la que se construye el autoestima y se establecen los valores de
vida y los mecanismos emocionales con que enfrentaremos la misma. Por lo tanto
los beneficios ni siquiera tienen que describirse. Pues son la empatía, el amor
propio, los buenos patrones de comunicación, y hasta la salud.
Tomando en cuenta todo esto, podemos ver
claramente que los beneficios no son solamente para el niño, sino que también
los recibe el entorno directo y por supuesto la misma sociedad.
Estoy totalmente convencido de que no se puede
establecer una sociedad sana con los viejos patrones del autoritarismo. La
única forma que hay de construir un mundo nuevo es establecer sus cimientos en
el amor, el respeto y la tolerancia. Y esto solo lo lograrán un nacimiento
humanizado, una crianza con apego y respeto y una nueva educación basada en la
empatía, el amor y la conexión con nosotros mismos y nuestra verdadera esencia.
6. ¿Por qué crees tú que aún hay tendencias que
creen que criar con apego es "malcriar" o formar "pequeños
tiranos?
Porque aún tenemos sembrados los viejos
valores patriarcales de la crianza autoritaria, que asegura que el castigo y la
represión son sanos y no dejan secuelas.
También hay quienes confunden la crianza
respetuosa con la permisividad total y el libertinaje. Existe mucha ignorancia
sobre el tema, y por supuesto a muchas personas las atemoriza perder el control
de la situación.
Primero que nada es necesario aclarar que la
crianza con apego dista mucho de ser algo anárquico, sin reglas ni valores. Al
contrario, es un estilo de crianza y educación que se fundamente en la
comunicación y el diálogo.
El mundo se ahorraría muchos problemas si sus
líderes tuvieran como prioridad escuchar a los demás y ponerse en los zapatos
del otro, eso justamente es lo que enseñan la crianza y la educación respetuosa
y con apego.
También es importante revisar qué es lo que
queremos de nuestros niños, si queremos que sean obedientes ciegos, que no
cuestionen nada, que simplemente sigan la fila y permitan que otros decidan por
ellos, que no hagan ruido, que no molesten, que no tengan pensamiento propio,
que no desarrollen plenamente su propia personalidad, pues la crianza
autoritaria nos cae como anillo al dedo.
Ahora, si lo yo deseo de mis hijos es que
tengan una sana autoestima, que cuestionen las cosas, que desarrollen empatía,
que traten con respeto a los otros y también exijan ser respetados, que sean
creadores de su mundo, que sean felices sin necesidad de tener que agradar a
los demás, que encuentren su propio camino y se conecten con su misión de vida,
pues la crianza autoritaria estará muy lejos de llevarme a allí. En este caso
la crianza con apego y respeto será la mejor opción.
7. Qué hacer cuando papa no existe en el plano
físico?(fallecimiento)
Cuando papá se ha marchado de este mundo,
obviamente deja una huella y un vacío tanto en el niño como en la pareja. La
recomendación acá es, antes que nada, vivir sanamente el duelo. No evadirlo ni
buscar distracciones, sino más bien vivirlo y enfrentarlo.
Siendo sinceros con nuestros hijos acerca de
cómo nos sentimos, de lo que pensamos sobre lo que sucedió. Y permitiéndoles
también expresar lo que ellos sienten.
Recomiendo para encarar el duelo con los
niños, elaborar una carta de agradecimiento y despedida al papá que se fue.
Mamá elabora una y el niño otra, pero ambos lo hacen juntos. Se vale llorar,
reír, escuchar una canción que gustaba a papá, cantarla o tararearla juntos,
contarse cosas que recuerdan de papá, etc. Si el niño es muy pequeño la carta
la debe hacer sólo mamá, pero contando y expresando todo al niño. Es una
maravillosa forma de encarar el duelo juntos y de soltar aquello que haya
quedado guardado y sin sacar a la luz. El duelo hay que sentirlo, hay que
expresarlo, sacarlo y bendecirlo.
Normalmente el entorno nos recomienda lo
contrario, que es la evasión. Nos aconsejan distraernos y no hablar más del
asunto. Esto no solo es dañino, sino que deja las heridas frescas y sin sanar.
También aconsejo a las mamás que pasan por
esta situación visualizar a su pareja fallecida a su lado, cuando tengan que
comunicarse con sus hijos. El vacío que ellos han dejado, muchas veces
dificulta la comunicación y el entendimiento entre madre e hijo. El solo
imaginar que papá está al lado de ustedes ayuda muchísimo a que la comunicación
se haga efectiva y el mensaje llegue claro. Eso, obviamente, si acompañamos lo
que vamos a decir con el amor y el respeto.
8. ¿Cómo estrecha vínculos un papa que no vive en
casa? (divorcio)
Papá debe tener claro que él se ha divorciado
de su pareja, no de sus hijos. Lo primero que aconsejo en estos casos es que
papá, en caso de que sea quien se vaya de casa, no se aleje de sus niños. Que
mantenga el contacto físico y les llame siempre que pueda, para que ellos
tengan claro que se separó de mamá, más no de ellos.
Mi sugerencia para papá y mamá en estos casos
es que no caigan en el error de hablar mal del otro frente a sus hijos, no
deben mal ponerlos o desahogar su ira hacia el otro, y mucho menos tratar de
manipular el cariño y le respeto de los niños poniéndoles en contra de uno de
su progenitores. Esto no daña a su expareja, daña a sus hijos. Les destruye el
autoestima y el respeto por ellos mismos, y deja huellas que son difíciles de
borrar y de sanar.
Si papá incumple con los compromisos acordados
en el divorcio, deben sentarse a dialogar primero de forma sana y constructiva
para llegar a un nuevo acuerdo, de no llegar a nada, pues mamá deberá recurrir
a las instancias legales, pero sin involucrar emocionalmente a sus hijos.
En estos casos, aconsejo responder a las
preguntas a sus hijos sin mentiras ni distracciones, pero evitando el chantaje
o la expresión descontrolada de ira hacia el otro. Por ejemplo, es preferible
decirles que papá quizás esté pasando por un momento de desorientación y aún no
se ha dado cuenta de que debe cumplir con ciertos compromisos. Y no cosas como
que papá es un irresponsable, un mal hombre o un descarado traidor.
Recuerden que la imagen que tiene un niño de
papá y mamá definen su relación con lo masculino y con lo femenino a lo largo
de su existencia. Por eso es tan importante que papá y mamá se esmeren en
desempeñar sus roles de la mejor manera posible, siendo responsables,
respetuosos, cariñosos, empáticos, comprensivos, abiertos al diálogo, y por
supuesto predicando con el ejemplo.
Recuerden esto: ¡Más vale lo que haces, que lo
que dices!
9. Y cuéntanos ¿Cómo llegaste a la Crianza con
apego?
Definitivamente fue la paternidad la que me
activó ese “chip” de papá que cría con apego y respeto. Llegué como llega la
mayoría, perdido y desorientado. Me pregunté lo que se preguntan muchos papás:
¿Y ahora qué hago? ¿Y el manual dónde está? El abrazar por primera vez a mi
hija y mirarle a los ojos activó algo en mí. Algo que jamás podré describir con
palabras. Quizá por ello nadie me lo había contado. Es como si mi hija me
hubiese dicho con la mirada: "Tranquilo, te escogí por algo. Confío en ti!"
Por supuesto, fue algo que me costó asimilar.
A la mayoría de los hombres se nos desconecta de eso, desde muy temprano. Se
nos dice que no debemos llorar, que no debemos jugar con muñecas, que debemos
ser "machitos"... y eso implica desconectarnos de nuestras emociones.
Aconsejo a los papás primerizos, que se dejen
llevar.
Que establezcan ese vínculo con sus bebés.
Que confíen en esa vocecita que habla muy
dentro de ellos. Y que dejen de escuchar a los "opinólogos" de turno.
Que se permitan amar, abrazar, llorar, reír,
saltar.
Que aprovechen la oportunidad que les da la
paternidad para abrazar a ese niño que aún vive dentro de ellos que aún puede
sentirse asustado, y hasta resentido por el abandono a que se le sometió.
Cuando el mundo les obligó a
"crecer", sacrificando la inocencia y la pureza que todos traemos al
mundo y que perdemos cuando éste nos contamina.
Permítanse ser niños de nuevo, permítanse
sentir... ...y jamás se avergüencen de demostrar amor. Creo que esa es la clave
para conectarnos con esa nueva paternidad que tanto necesita el mundo! :)
Elvis, que buen aporte a la construcción de la PAZ!
ResponderEliminarExcelente entrevista! Maravilloso aporte para el Planeta Elvis! Gracias
ResponderEliminarBello ! En especial eso de que la imagen de papa y mama es clave para lo femenino y lo masculino en nosotros. Toda mi vida y aun ahora de adulta , eso me resuena mucho porque tengo la mala experiencia de haber vivido con padres que hablan mal uno del otro, y eso duele, tengas la edad que tengas. Me aclara muchas cosas en mi , que me ayudaran a sanar lo que haya que sanar en mi niña para ser una mejor madre de mi hijito. Cariños
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