Mi nombre es Sarah, Tres años de edad; Mis ojos hinchados No puedo mirar... Debo ser estúpida, Debo ser mala, Porqué otro motivo ¿Mamá está enojada?... Quisiera ser mejor, Quisiera fea no estar, Entonces tal vez Mami Me quiera abrazar... No debo hablar, No debo hacer mal; De lo contrario, Todo el día me van a encerrar... Cuando despierto Siempre estoy sola, La casa esta oscura Por horas y horas... Cuando Mami regrese Trataré de ser buena Si ella me golpea Que sea solo una... No hagas ni un ruido, La puerta acabo de escuchar; Mi Papi ha llegado Borracho de un bar... Lo escucho enojado Mi nombre gritar Y contra una pared Me trato de resguardar... Trato de esconderme De su horrible mirada, No aguanto el llanto Me siento espantada... Me encuentra llorando Me grita, me insulta Me dice que sus problemas Son por mi culpa... Me empieza a golpear Me sigue gritando, Me logro soltar Y corro tropezando... Caigo al suelo Mis huesos doliendo Papá me dice palabras Que ya no le entiendo... "Perdóname" le grito Pero ya es muy tarde, Su rostro desencajado Parece que arde... Los golpes y las palabras Me duelen de verdad, Le pido a Dios Misericordia y piedad... Por fin él termina, Y camina a la puerta, Mientras yo en el suelo Quedo casi muerta... Mi nombre es Sarah, Tres años de edad; Esta noche mi padre... Me mató sin piedad. (Nadia Reyna)
Había un ser muy pequeño En las entrañas de una mujer Que veía en su sueño Que habría de nacer. Lo deseaba con tal frenesí Y con tanta ilusión lo esperaba Que llegó a soñar que cantaba Este canto que dice así:
Yo quiero nacer Y quiero conocer El color Que tiene cada flor. Yo quiero ya jugar Y el juego disfrutar Con otros niños Ya quiero recorrer Los campos por doquier; Escuchar Mil pájaros cantar. Ya quiero sonreír Y quiero recibir Muchos cariños.
Pero alguien pensó de otro modo Y en un instante fatal decidió Que terminara todo ….y todo terminó. Y ahora ya nunca podrá Conocer el color de las flores Ni escuchar pajarillos cantores Ni decir: “Yo te quiero, mamá”.
*Ser amados sin límite. *Ser respetados como personas que son. *Ser tratados como niños, no como adultos. *Ser abrazados cada vez que lo pidan. *Ser tomados en cuenta, y no ignorados. Cuando un niño llora no está manipulando, está pidiendo atención porque sencillamente es un niño. Los adultos si manipulan, los niños no. *Ser correspondidos cuando dan amor. *Ser escuchados. *Ser guiados con buen ejemplo. Es inútil que les exijamos no hacer algo o le digamos que algo es malo, si nosotros lo hacemos. Los niños no dejan de observarnos y aprenden de nuestra conducta y nuestras reacciones. Si no quieres que tu niño diga malas palabras, no las digas tú. *Tener tiempo libre para jugar. Exigirle ser perfectos y los mejores en todo solo los agotará y les creará apatía. Los niños deben jugar muchísimo, jugando aprenden. *Tener libertad para escoger sus actividades. No debemos tratar de realizar nuestros sueños a través de ellos. Si un niño disfruta bailando no quiere decir que quiere ser bailarín profesional o artista internacional. Debemos respetar sus elecciones y no obligarlos a nada. *Tener amigos escogidos por ellos, y no por nosotros por su color, clase social, religión o porque sus padres nos caen bien. Son sus amiguitos no los nuestros. *Tener una educación adecuada, sin exigencias ni actividades académicas exageradas. Necesitan tener tiempo libre para jugar y estar con los suyos. *Estar alejados de cualquier tipo de adoctrinamiento político, racial, de odio, bélico o de cualquier asunto relacionado al malogrado y malhumorado mundo de los adultos. *Y por último deben simplemente ser niños, y hacer de esa experiencia una compilación de hermosos recuerdos, ya que se es niño una sola vez en la vida!!!!!!!!!!!!! (Por Elvis Canino)
*Ser Maltratados física, verbal o sicológicamente bajo ningún pretexto.
*Ser humillados en público.
*Ser ignorados.
*Ser pellizcados, abofeteados, palmeados, golpeados con cinturón, golpeados con el puño, o cualquiera de esos contactos físicos agresivos que muchas madres y padres acostumbran utilizar para descargar su ira.
*Amenazado con dejarlo solo, abandonado, encerrado, con el “coco”, con “el señor que te vá a llevar”, en el cuarto oscuro, y cualquier otro tipo de chantaje emocional muy utilizado en tono de juego para hacerlos sentir temor.
*Ser presionados para que sean los mejores, bien sea en el ámbito escolar, deportivo y/o social, y mucho menos comparado con otros niños ya que esto destruye su autoestima.
*Ser presionados a comportarse “como adultos” en reuniones sociales, restaurantes, y demás situaciones donde muchos adultos te mirarán mal si tus niños no demuestran, con su buen comportamiento digno de una persona grande, que los has criado con mano firme.
*Ser obligados a trabajar.
*Ser privados del derecho a estudiar.
*Ser ideologizados con política, racismo, clasismo y demás asuntos sociales que no corresponden a la niñez. Más cuando son asuntos inclinados a cualquier tipo de discriminación o de odio.
*Ser privados de su derecho a jugar, a fantasear, a reír, a saltar, en fin……..a ser niños.
*Ser tocados, mirados, fotografiados, filmados con carácter sexual y/o erótico.
Hace un tiempo se me ocurrió preguntarle a un niño al que quiero mucho, qué hacían con ellos en la escuela cuando se “portaban mal” (Término con el que no estoy de acuerdo; son niños……por Dios) su respuesta fue más o menos así: -“A los niños malos los mandan al cuarto de pensar o si no los hacen arrodillar viendo hacia la pared para que se arrepientan de lo que hicieron…..” Pregunté: -“Quien les hace eso?”. Y su respuesta inocente fue: -“Las monjas, o la maestra………” Mi primera reacción fué mirar hacia el almanaque más cercano para comprobar si estaba en el año 2009 o si un agujero ínter dimensional me había trasladado hasta los años de la inquisición. Mayor fue mi sorpresa al comprobar que efectivamente aún me encontraba en el siglo XXI. He estado preguntando a otros niños sobre el llamado Cuarto para pensar o Rincón de pensar; todos me han afirmado tener uno en su escuela, incluso una niña de preescolar!!!!!!!!!! Por Dios………. Sé de casos de Maestras que les retuercen las orejas, les dan con la regla, o sencillamente los humillan delante de los demás alumnos. Mi vecinito, apenas en Preescolar, se quejaba de que su Maestra les ponía apodos. Conozco maestros (as) cercanos a mí que se refieren a los niños como pequeños tiranos, demonios, enanos siniestros, etc. Cualquier calificativo o etiqueta que los relacione con el mal. En mi escuela, el Director siempre recorría el Patio en el receso con una regla de Metal, a niño que veía corriendo le pegaba con la misma. Cuando le contaba esto a mis padres, su respuesta era algo así: -“Así se portarán, para que el Director haga eso.” Por Dios……… Sé que muchas personas aún piensan así, ya que esto es lo que la sociedad ha venido diciendo que es lo correcto. Vivimos en una sociedad que dice que el niño debe ser separado de su madre al nacer para que los médicos “hagan lo suyo”, que la lactancia debe darse con horarios y no a demanda, que el niño debe dormir solo en su cuarto, que debe controlar esfínteres a más tardar a los dos años, que no debe ser llevado en brazos porque se va a “malcriar” y no se va a adaptar al mundo competitivo de hoy, que debe “ponérsele carácter” a tiempo o no servirá para nada., que los maestros deben disciplinarlos para que sean hombres y mujeres de bien. Y nunca nos dice, la sociedad, que el contacto con su madre apenas nace le va a tranquilizar en un momento tan traumático como la salida de su mundo acuático (tan seguro y cómodo para él), que la lactancia debe dárseles a demanda y que cualquier mujer puede amamantar, que el dormir con sus padres es la forma instintiva del cachorro humano crecer con seguridad, que el control de esfínteres es un proceso natural que toma su tiempo y puede extenderse hasta los tres años sin problema, que un bebé llevado en brazos es un bebé que crece sintiéndose seguro y con una gran autoestima, que se enseña con el buen ejemplo y no con el castigo o que los maestros están para enseñarlos y orientarlos pero NO, absolutamente NO para estar aplicándoles castigos que ellos consideran disciplina. Personalmente creo que nuestra sociedad apenas está despertando a muchas cosas, que aún tiene muchas raíces en el siglo pasado e incluso más atrás. Todas estas cosas que mencioné anteriormente y que hoy día se acostumbra a ver como lo correcto son formas de maltrato. Iré abordando cada una de ellas por separado ya que hay mucho que decir sobre el tema; por ahora lo que me gustaría que recordáramos es que debemos estar atentos a los métodos disciplinarios de la escuela de nuestros niños, debemos conversar con ellos sobre esto y hacerles saber que no están obligados a recibir ningún tipo de maltrato por parte de educadores y/o directores de escuela. Y que confíen lo suficiente en nosotros como para contarnos cualquier irregularidad de este tipo que les suceda directa o indirectamente. Y si eres maestro(a), recuerda que tu profesión es para enseñar y orientar, pero con amor. Que son niños, no adultos. Y que no es una cárcel, es una escuela. Recuerda también que ese niño de hoy es el adulto de mañana, y que no tiene la culpa de tus problemas. Papá, mamá……..son ustedes los que pueden ir cambiando esto. Por supuesto me quito el sombrero ante los muchos maestros y maestras que realizan su función con amor, y que saben que tienen en sus manos el futuro. A ustedes…….mil gracias. (Por Elvis Canino)
El tiempo que dedicamos a nuestros hijos es más valioso que el oro. Y conste que no es por la cantidad de tiempo en si, sino por la calidad del mismo. Lo más importante en estos momentos juntos es mostrarnos interesados en su mundo, en sus comentarios, en sus juegos; de hecho es una terapia invaluable para el stress que nos agobia del día a día. Muchos padres creen que darle tiempo a su niño es inundarlos de cosas materiales o simplemente sentarse con ellos a ver la tele en silencio. No estoy juzgando ninguna de estas dos actividades, pero debemos darnos cuenta de que lo que nuestros hijos realmente necesitan de nosotros es que les transmitamos seguridad, confianza, valores, y por sobre todas las cosas que los escuchemos. Los adultos ni siquiera nos escuchamos entre sí, cada quien anda concentrado en lo suyo, cada quien quiere tener la razón, cada quién quiere ser mejor que el otro; y que mundo hemos creado con esta actitud? No se trata de ser perfectos, ni de ser santos, se trata de saber que nuestro mundo necesita un cambio, y que este cambio no va a venir de afuera, de un político, un cantante, o determinada religión. Este cambio comienza en nuestra casa, en nuestros hijos que son el mañana. Si seguimos cegados por el trabajo y las preocupaciones materiales y siempre decimos que escucharemos a nuestros hijos cuando tengamos tiempo, cuando menos lo esperemos se habrán ido a hacer sus vidas, y entonces pensaremos: “Si hubiese trabajado un poco menos, y disfrutado más de mis muchachos.” No esperes a que esto suceda, disfrútalos ahora, bésalos ahora, abrázalos ahora, escúchalos ahora, juega con ellos ahora. Claro que debes dedicarte a tu trabajo y a tus actividades, pero no dudes en sacar tiempo para disfrutar a tus hijos, es más, dales la prioridad en tu agenda y en tu vida. El tiempo pasa volando, y esos recuerdos son el único equipaje que llevaremos al morir. Y recuerda: “El Castigo no enseña, el amor y el ejemplo sí.” (Por Elvis Canino)